Implantología

Se trata de un pequeño tornillo de Titanio que realiza la función de la raíz dentaria.

Se coloca en el hueso maxilar o mandibular a través de una técnica relativamente sencilla en la mayoría de los casos.

Pasado el periodo de osteointegración (tiempo de unión entre hueso e implante) se colocará una corona con sus aditamentos protésicos, consiguiendo así la rehabilitación de la zona.

• Es un método fijo, no se mueve al comer o hablar como las prótesis removibles.
• No se dañan los dientes adyacentes, un clásico de los puentes de toda la vida. Pueden necesitarse posteriormente tratamientos sobre las piezas que sostienen el puente.
• Facilidad de higiene frente a los puentes convencionales (en casos de implante unitario).
• Mayor durabilidad, acudiendo a las revisiones que ordene el especialista.
• Mejor estética con el paso de los años.

La pérdida de uno o más dientes puede provocar un gran prejuicio al equilibrio de su boca. La pérdida de piezas afecta a la correcta oclusión y no reponerlas puede provocar una sobrecarga con nuestra masticación, sufriendo por ello los dientes vecinos, pudiendo llegar a perder otros dientes también.
Los dientes colindantes y antagonistas con el paso del tiempo tienden a moverse hacia el hueco que deja el diente perdido, lo que, perjudica especialmente a los pacientes con problemas periodontales.
A mayores puede comprometer en un futuro la posibilidad de rehabilitar la zona, no solo por la falta de espacio, sino por la atrofia de hueso que se produce con el paso del tiempo, dejando como única alternativa cirugías previas para la realización de diferentes tipos de injertos.

Sin duda el caso más sencillo… a priori, pero no por ello, dejamos de planificarlo y prepararlo rigurosamente, pidiendo todas las pruebas complementarias necesarias, ya que muchas veces son los casos que mayores compromisos estéticos pueden tener, y nuestra misión es conseguir que sonrías sin miedo .

El tiempo de intervención es relativamente corto (pudiendo rondar los 15 minutos!!! en los casos más favorables), precisando la misma cantidad de anestesia que para un empaste.

En casos en los cuales exista el compromiso estético, tenemos la posibilidad de realizar una carga inmediata siempre y cuando las condiciones del paciente lo permitan, saliendo el paciente de la consulta con diente.

En estos casos tenemos la gran ventaja de que podemos sustituir un número mayor de dientes con menos cantidad de implantes. Con la realización de estos puentes podemos llegar a reponer 5 dientes con tan solo 3 implantes. La intervención aunque en teoría es más duradera que la del caso anterior, sigue siendo una intervención rápida siguiendo nuestra metódica sistematología y que requiere poca cantidad de anestesia local, pudiendo realizar uno o varios tramos en menos de 1 hora.

Son los casos más complejos y los que tienen un mayor abanico de posibilidades protésicas. Requieren una minuciosa planificación, en la que los TAC son la herramienta imprescindible y donde nos ayudamos de férulas quirúrgicas y del soporte informático para tener la mejor planificación posible.

Buscamos satisfacer todas las carencias que tienen estos pacientes; logrando una correcta oclusión que no provoque ni problemas musculares ni articulares, conseguir una sonrisa agradable y natural, obtener una compensada armonía facial, y poder comer y hablar de la manera más normal.

Las opciones implantológicas para estos pacientes pasan por las rehabilitaciones totalmente fijas que se pueden realizar con la colocación de 5-8 implantes, dependiendo de la zona (arriba o abajo) y de las características del paciente.

A los implantes colocados se les atornilla una estructura que el paciente siempre llevará fija, y que únicamente será retirada cuando este acuda a las imprescindibles revisiones de la prótesis. En caso de alguna duda, estaremos encantados de recibirle y estudiar su caso para ofrecerle la opción ideal.

Otra opción consiste en coronas de resina sobre una estructura de metal atornillada sobre los implantes de forma fija. Se pueden utilizar de 6 a 8 implantes para sostener una prótesis dental híbrida «fija». Se deben levantar al menos una vez al año para su limpieza. Sólo puede ser removida por el odontólogo.

Existen también las prótesis «fijas» pero removibles, que se consiguen gracias a la colocación de 4 implantes en la zona maxilar o 2 implantes en la zona mandibular. Gracias a los implantes y a varios tipos de ataches o anclajes, se consigue que prótesis como las de antes puedan mantenerse fijas y se eviten las odiosas molestias que provocan los movimientos al comer o hablar, teniendo solo que quitarla para realizar una correcta limpieza tanto de la prótesis como de los pilares sobre los implantes. Estas son las sobredentaduras. El paciente retira la prótesis para su limpieza.